Jordi Castell, diablo y santito a calzón quitado:“ME EXCITA VER A MI PAREJA CALIENTE”

No cree en Dios pero sí en su santa abuela que en paz descansa. Es a ella a quién le reza todos los días por intermedio de una imagen del Sagrado Corazón, es por ella que de pequeño fue sacristán, labor que no volvería a realizar ni a palos de no ser que el padre Felipe Berríos fuera cardenal o Papa. Para el asesor de imagen, fotógrafo, modelo y director de la escuela de diseño de la UNIACC, la fe se manifiesta creyendo en el amor, el mismo que lo atrapó hace un par de años en la figura de un colombiano sexy de ojitos brillantes a quien le interesa excitar cuando se pasea desnudo por su departamento. Guapo, ultra guapo, Jordi habla de hombres y mujeres en la cama, de seducción, de polvos casuales, del tamaño del miembro y de homosexuales pasivos y activos. En fin, le llevamos harto sexo y un poquito de fe. Como bonus track, sepa si su nombre es Jordi Castell o Jorge Castillo.

¿Crees en Dios?
Creí durante mucho tiempo porque me crié en una familia católica. Luego, cuando tenía como nueve años, sufrimos un dramón bien fuerte a raíz de la muerte de mi tío razón por la cual mis abuelos renegaron mucho de la fe. Para que mi abuela retomara su fe me metí a sacristán, ayudé en misas e hice catecismo para la primera comunión. La verdad es que tuve que creer porque mi objetivo era reestructurar mi familia. Después de la muerte de mi tío mi abuela se enfermó de cáncer y el día que murió, en el año ochenta y nueve, fue el último en que pisé una iglesia. Murió mi abuela y mi fe en Dios o imágenes murieron con ella.

Un hombre de poca fe...
Soy un hombre de mucha fe. Tengo colgado un escapulario y si entras a mi casa te vas a encontrar con un Sagrado Corazón, que era el de mi abuela. Estando ella enferma me pedía que le rezara al Sagrado Corazón y eso es lo que hago desde ese día, no porque crea en él sino que porque era de mi abuela, mi santa. Hace tres años, un día a las diez de la mañana me encontraron unos tumores en la cabeza y a eso de las tres de la tarde de ese mismo día, a la salida del supermercado y tirado en el cemento del estacionamiento me encontré un escapulario del Sagrado Corazón. Automáticamente lo tomé, me lo puse y no me lo saco nunca más.

Nada con la iglesia...
Si la iglesia estuviera manejada por sacerdotes como Felipe Berríos, Renato Poblete o Fernando Montes, te aseguro que sería completamente católico, pero no es así. Felipe Berríos es un ejemplo de muchas cosas, ni te imaginas cómo lo admiro, tiene una grandeza de espíritu, una capacidad de conciliar y de dar increíble. Si él fuera cardenal o Papa yo sería sacristán pero la iglesia está manejada por señores que están muy distantes de las enseñanzas de Cristo y de la palabra de Dios; grupos como el Opus Dei, Schoenstat y los Legionarios distancian a la gente de las iglesias, especialmente a los más jóvenes.

¿Qué es lo que más te carga de la iglesia?
Separemos fe de religión e iglesia. De la iglesia no me molesta que tengan sus principios, que sean una gran mayoría, que tengan sus doctrinas, que no crean ni en el divorcio, ni en el condón, ni en las relaciones prematrimoniales, ni que rechacen a los homosexuales. Lo único que me provoca un grado de resquemor es cuando tratan de hacer creer a todo el mundo que tienen que pensar como ellos, que el mundo entero debe ser concebido de la manera como ellos lo conciben.

¿Te llama la atención la figura de Jesús?
Desde chico siempre me he sentido muy atraído por la figura de Jesús crucificado no sólo a nivel religioso sino que a nivel pictórico y artístico con esas manos clavadas y ensangrentadas, con ese paño casi cayéndose que deja entrever algo pero no. No quiero decir que me parece erótico pero sí que me parece muy cercano a lo intuitivo, a lo real. Cada vez que miras a Jesús crucificado tiene algo de no sé, como de exacerbar lo perfecto de la figura humana... es que estoy pegado con el libro “El Código de Da Vinci” y te podría dar cátedra de cada uno de sus capítulos porque el tema de los dioses y de la historia de las religiones me interesa mucho.

¿Cómo y cuando rezas?
La fe que tengo va por la necesidad de creer en algo, de rezarle a mi abuela todas las noches o antes de un momento importante para sentirme protegido. No creo en un dios al que encuentras mirando para arriba y que te proteje, no. Yo creo en las teorías científicas que hablan de que el mundo se formó a partir de moléculas. También creo que Jesús existió, que fue un profeta fantástico y un hombre único pero que su pueblo lo obligó a tener un rol tal vez mucho más importante por salvar a su propia raza. Por lo demás, creo que Jesús fue un hombre que tuvo mujer e hijos, no lo que dice la biblia.

Sin una religión te salvaste de sentir la culpa que experimentamos los creyentes...
Para mí la culpa es una cuestión más de instinto y valórica que algo que tenga que ver con la religión. Yo puedo ser culposo pero no por una cuestión pecaminosa o eclesiástica. Ahora, también me he sentido cometiendo pecado pero ha sido tan frío y calculado que también lo tengo claro. Mis pecados no van por el sexo o hacer esto y lo otro, para mí pecado es la traición, por ejemplo.

Fe y sexo.
Sin fe no hay sexo y sin sexo no hay fe.

No entiendo.
Tú puedes canalizar la fe hacia la persona que amas, puedes tener fe en el amor, que es verdadero y hace bien. El amor es una consecuencia que lleva rápidamente al sexo porque es una manifestación del sentimiento.


MARICÓN DE CHIQUITITO
¿Sentiste culpa cuando te descubriste homosexual?
Nunca me descubrí porque siempre fue parte de mi naturaleza y nunca en mi familia se me hizo sentir como si fuera un pecado o algo que tuviera que descubrir.

Te pregunto porque homosexules como Passalacqua, de niños se sentían culpables cuando se pillaban mirándoles el poto a sus compañeros de curso.
A mi nunca me pasó eso. Siempre fui descarado y asumido. Para mi era muy natural y en mi familia lo percibieron esto desde que fui muy. Desde chico me he sentido maricón tal como me he sentido toda la vida no más.

¿Intentaste con chicas?
La primera vez que me acosté con alguien fue con una novia con la que llevábamos pololeando un año. Fue súper lindo, súper ideal y la mejor forma en la que pude despertar sexualmente, pero ahí ya la tenía clara. En esa época yo ya fotografiaba a mis compañeros de curso duchándose en los camarines.

¿A qué edad tuviste tu primera pareja homosexual?
¿Mi primera pareja o mi primer polvo?

¿Qué fue primero?
El polvo, obvio, como a los dieciséis años. Antes me tiré a todas las minas, es decir, a todas las que se me ponían por delante.

¿Qué les gusta a las mujeres del hombre en la cama?
Que les respeten el ritmo. Los hombres somos mucho más animales en circunstancias de que las mujeres son mucho más de sensaciones. El placer de la mujer es mucho más evolucinado que el del hombre porque el del hombre se consigue con una mano y en trece segundos estás listo si quieres. El placer de ellas es mucho más de tacto, de besos, de fluidos y de generar todo un proceso que da cuenta de un nivel de comunicación mucho más evolucionado que el de los hombres. Entre dos hombres agarras un lubricante lo metes y lo sacas y estás listo.

¿Qué le gusta a los hombres de las mujeres en la cama?
Depende, porque hay hombres que lo único que buscan es satisfacerse a sí mismos, entonces no hay mucho que abordar ahí. En cambio, al hombre que realmente le gustan las mujeres siempre va estar preocupado de la comunicación, insisto, del ritmo y de cosas mucho más sensoriales.

Si los hombres son menos evolucionados ¿Cómo se tiene buen sexo entre homosexuales?
Siempre creí que el sexo era gozar uno; que el otro se las arreglara como pudiera pero desde que conocí a mi actual pareja aprendí a ponerme en segundo lugar y a estar mucho más preocupado de que él goce conmigo, de ir respetando los tiempos y no dejar de acariciarse, de besarse y mezclar calentura con amor, respeto y complicidad. Esa cercanía de códigos que hay en una relación de amor hacen que el sexo sea infinitamente superior a un polvo rico y calentón que te pegas en cualquier momento en una esquina.

Antes de conocer a tu pareja actual ¿cómo ean tus polvos?
Siempre he sido de relaciones largas. Es bien fácil decir que uno es bueno para la cama cuando está soltero y en un fin de semana se tira a cinco huevones, ese es el discurso clave de un tipo que se quiere jactar de macho pero creo que la evolución del sexo está en acostarse siempre con la misma persona porque siempre vas a estar innovando, arriesgándote y seduciendo de otra forma. Por lo mismo he apostado a relaciones duraderas. Yo soy muy conservador.

¿Qué hay del sexo casual?
Es una escuela muy necesaria, muy útil. En lo personal tuve mucho sexo casual en una época, siempre con condón, obvio. Me aburría el sexo casual por que te ves tan autosuficiente y es tan autorreferente que te termina dejando vacío.

¿Cuál es el polvo más más raro que te haz pegado?
La preguntita.

¿Con cuántos?
Oye, soy director de una escuela de diseño. Ni loco te voy a contar las partuzas en las que he estado. No he estado en partuzas, es una forma de decirlo.

¿Cuáles son las categorías que existen dentro de los homosexuales?
Yo tengo bien poco contacto con el mundo homosexual. Dos de mis grandes amigos son homosexuales pero la gran mayoría son hétero porque nunca me divirtió ir a discotecas de maricones. La cosa cofradía no me llama la atención, nunca me sentí atraído por esa cosa tan sectarista que tienen todas las coductas, las lesbianas, homosexuales y también los héteros. Los huevones con el jeans metido en la raja bailando en la discoteca entre todos me da una lata horrible.

HOLA. CÓMO TE LLAMAS. DÁME UN BESO. VÉNTE CONMIGO
¿Cómo conociste a tu pareja actual?
Un día sábado, en el gimnasio. A mí siempre me cargó que los hombres me sedujeran y se acercaran a conversarme, pero cuando se me acercó este colombiano con esas pestañas, con esa boca y esos ojitos que le brillan no te digo cómo y me empieza a hablar... más encima me trató de usted porque los colombianos son así... me pareció tan sexy que me di cuenta que él era lo que yo quería y que hace mucho tiempo andaba buscando: un hombre que me diera vuelta y que no tuviera nada que ver conmigo. Ese día nos fuimos a tomar un café, conversamos, a los tres días nos vimos nuevamente y no nos separamos más.

¿Siempre has reconocido a los homosexuales o te has pegado planchazos al enterarte que el tipo que te gustaba no era homosexual?
Nunca he sido de andar pendiente mirando hombres y cuando lo fui, sabía para donde mirar. No soy de los que le gusta coquetear ni de hacerme el lindo, soy más al grano: “hola, cómo te llamas, dame un beso, vénte conmigo”.

¿El sexo entere dos hombres es siempre igual o tiene muchas posibilidades, muchas poses?
Son las mismas que puedes hacer en una pareja heterosexual.

Si te gustaran las mujeres ¿a quién te gustaría tirarte?
Por respeto a mi pareja no puedo contestarte esa pregunta: estoy casado con un hombre y no puedo andar hablando de eso.

Imagino que las niñas se te tiran encima pensando “A este lo recupero”...
Tengo harto éxito con las mujeres, no sé por qué.

Porque eres buen mozo pues.
Tampoco quiero tener conciencia de ello. No me interesa estar pendiente de lo que causo físicamente; me interesa andar en pelotas en mi departamento y que mi pareja se excite conmigo.

¿Eres calentón?
¿Qué es ser calentón?

Andar caliente, pensar todo el día en la cochiná...
Últimamente no tanto porque estoy un poquitico estresado, entonces la actividad sexual la tengo medio abandonada pero mi pareja se encarga de recordármela todos los días. Mi pareja es bien caribeña, anda pendiente siempre y a mí me fascina que sea así, me excita verlo caliente.

¿En una pareja homosexual siempre uno es pasivo y el otro activo?
No siempre. Se supone que hay roles que son activo, -el que lo mete- y pasivo, -que es al que le gusta que se lo metan. Yo difiero un poco de eso, muchas veces he sentido que lo puedo estar metiendo pero que me pueden estar dominando o al revés y siento que tengo el sartén por el mango. Yo voy a seguir siendo igual de hombre aunque me lo metan. Hay gente, es verdad, que solo le gusta meterlo y otra a la que sólo le gusta que se lo metan pero yo soy súper adapatable a las circunstancias y me viene por épocas porque me carga premeditar el acto sexual. Lo más excitante del sexo entre dos hombres es no saber lo que va a pasar, no saber quién va tomar qué rol, tirarse al vacío.

¿Importa el tamaño?
¿Cómo me haces esa pregunta?

Por qué no sé.
Depende lo que sea grande y lo que sea chico. Los picos grandes pueden ser idealmente muy excitantes pero no sé si quepan o si duelen. Hasta ahora no he sabido de tamaños de picos porque nunca me ha tocado uno que me haga decir “¡Oh! ¡qué chico!” o al revés, “¡Oh! ¡qué grande!”. Estoy muy agradecido de la suerte que he tenido.

¿Todo se reducirá a sexo?
Creo que el sexo está sobrevalorado, que somos una sociedad de eyaculadores precoces, de gente inmadura, que por todas las castraciones políticas y culturales que hemos sufrido no hemos podido evolucionar a la velocidad de un país desarrollado, culto y educado. Como cultura recién estamos entrando en la adolescencia y eso nos ha llevado a engolosinarnos con tetas de silicona y con programas a las seis de la tarde donde salen niñitas moviendo el culo. Somos una sociedad muy inmadura y por eso estamos tan pendientes del sexo pero en la medida que existen otros estímulos más, el sexo pasa a ser uno más, no por eso menos importante pero no como para andar todo el día hablando de la huevada.

Por último ¿Te llamas Jordi Castell o Jorge Castillo?
Con toda esta cobertura mediática que he tenido he descubierto no sólo envidia sino que también insidia, curiosamente, de gente que yo creía estaba cerca de mí: un tipo que yo creía mi amigo dijo esto que me dices públicamente en un programa de televisión. El punto es que soy nieto de un catalán y me bautizaron como Jordi Castell, mi carnet dice así, mi padre se llama así.

Menos mal mira que el rumor este de que te cambiaste de nombre daba para pensar que eras un siútico...
Soy lo menos siútico que hay, soy un huevón que viene de una familia de clase media de mucho esfuerzo, sin apellido ni linaje ni herencia, de una familia que se ha sacado la chucha. La palabra “sobrexpuesto” también es un síntoma de envidia porque si yo estuviera solo en mi casa sin nada que hacer y fuera junior, un anónimo y tuviera que lavar autos para ganarme la plata todo el mundo me criticaría por ser un loser. El hecho de que me vaya bien, de que aparezca en todos lados, que todo el mundo me de pega y se fije en mí es porque probablemente tengo algo que decir y estoy reflejando a un sector de la población que es importante que se manifieste.